Para iniciarse en el ecológico, saludable y divertido mundo que es tener un huerto en casa, recomendamos que empieces con un cultivo fácil y rápido que te permita aprender los fundamentos de la horticultura y obtener buenos resultados en la recolección.
Podemos realizar el ciclo del cultivo completo (desde la siembra de las semillas hasta la cosecha) o adquirir plantel (semilla germinada) con lo cual nos saltaríamos la siembra y germinación de la semilla simplificando el proceso y acelerando los resultados.
Para empezar, en este tutorial os recomendamos cultivar Lechuga Romana Larga Verde, por ser un cultivo relativamente fácil, rápido y que se puede realizar prácticamente todo el año (tendríamos que evitar los meses más calurosos por el riesgo de subida a flor o espigado).
Paso 1: El semillero (sólo para los que hayan preferido realizar en ciclo del cultivo completo)
Necesitamos una bandeja semillero con el número y tamaño de alvéolos (compartimentos) apropiados para cada tipo de cultivo, en nuestro caso una bandeja de 84 o 60 alvéolos sería suficiente. El sustrato básico que recomendamos es Ciemhus Universal, ya que este es suave, esponjoso y retiene muy bien la humedad.
- Rellenamos los alvéolos que necesitemos de la bandeja semillero con la el sustrato presionando la turba suavemente.
- Con el dedo presionamos la turba en el centro de cada alvéolo formando un hoyo de 1 cm de profundidad aproximadamente.
- Depositamos la semilla en el hoyo y la tapamos con turba. Presionamos suavemente.
- Regamos con cuidado, podemos utilizar un spray para regar y así evitaremos desperfectos.
La temperatura óptima de germinación suele estar entre 25-30 grados. Si estamos en una época fría del año, podemos germinar las semillas dentro casa en un lugar luminoso (cerca de una ventana). También podemos utilizar un propagador (mini-invernadero) .
Debemos controlar la humedad, sobre todo que no se riegue en exceso ya que esto podría provocar el pudrimiento de las semillas.
Paso 2: Trasplante.
Cuando la planta tenga entre 10 y 15 cm de longitud, procederemos a su trasplante a un recipiente mayor (para 1 planta de lechuga, una maceta de 22 cm como mínimo) o directamente a la tierra, dejando una separación entre lechugas de 25 cm y entre filas de 50cm.
En el trasplante hay que tener cuidado de no romper demasiadas raíces, y regar inmediatamente después de haber trasplantado la planta.
Paso 3: Cultivo, abonado y recolección.
Para llegar con éxito al final del cultivo, hay que tener en cuenta las posibles plagas y enfermedades que pueden afectar a nuestras plantas. Desde Hortinatura.com os aconsejamos que si veis alguna anomalía en vuestras plantas, nos mandéis un mail con unas fotos del problema a info@hortinatura.com, nuestro departamento técnico os dará una solución personalizada a cada caso.
El tipo de abonado depende de las características de la tierra, del tipo de cultivo, etc. Desde Hortinatura.com os recomendamos HN-Universal Organic 5 kg-Uso Agrícola, que por sus características y formulación se adapta perfectamente a todo tipo de tierras y cultivos. Lo aplicaríamos transcurridos 10 días desde el trasplante. Es conveniente aplicar el abono y seguidamente regar abundantemente.
El tiempo que debe transcurrir entre el trasplante y la cosecha, puede variar entre un mes y medio y 3 meses, dependiendo de la época del año en que estemos.